sábado, 21 de enero de 2012

Comercio Justo

El comercio justo es una alternativa al comercio convencional que permite a los productos de países del Sur acceder a los mercados del Norte. Esta forma de intercambio promueve el respeto a los trabajadores, garantizando unas condiciones dignas. Además, posibilita una relación más directa entre el consumidor y el productor al eliminar el exceso de intermediarios, que terminan encareciendo el producto.
Mediante esta forma de comercio el productor obtiene un ingreso que refleja el valor real de su trabajo y les permite impulsar sus propios medios de desarrollo comunitario y comercial. A cambio, el consumidor obtiene un producto de calidad (física, social, cultural, ecológica) a un precio razonable mientras brinda apoyo al desarrollo sostenible del productor y contribuye al cuidado del medio ambiente.

Los principios del Comercio Justo son:
  • Pago justo por la producción
  • Respetar los Derechos Humanos (No explotación infantil, no explotación laboral, no discriminación)
  • Prefinanciación de la producción y relaciones comerciales a largo palzo: los productos revierten en el productor y su comunidad antes de la entrega, al pagarse por adelantado entre el 40% y el 50% del total, permitiendo hacer una previsión necesaria para una producción sin endeudamiento
  • Respeto al Medioambiente, cultura y sistemas tradicionales de producción
  • Desarrollo de la comunidad: las organizaciones productoras dedican parte de los beneficios a cubrir necesidades comunitarias como la sanidad, la educación, la formación laboral, etc.
Para reconocer un producto de Comercio Justo en el mercado, debemos fijarnos en su etiquetado:

Esta es una página de interés donde se muestran diferentes productos de Comercio Justo a la venta, como zumos, cafés, infusiones o chocolates y dulces:

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